jueves, 30 de agosto de 2007

GRACIAS, PULGA


Pulgacroft, desde su asteroide, me ha nominado para una movida que se llama "Thinking Blogger Awards".

Muchas gracias por pensar en mí. En esta pescadilla, al principio alguien hizo pensar a otro, este otro se dio cuenta y le premió y el premiado se tuvo que poner a pensar quiénes le hacían pensar para, a su vez, nominarles, y...

La verdad es que es una buena manera de animar a la gente a que se lean los unos a los otros y (si se tercia) que se hagan pensar. Aunque sea mal.


Bueno, el caso es que para hacerlo bien, además de ponerme el modelito y entrar del brazo de George Clooney, pisando la consabida alfombra roja más fuerte que Alejandro Sanz, tengo que cumplir una serie de requisitos (espero haberme enterado):


1- Nominar -premiar a otros cinco blogs que me hagan pensar.

2- Enlazar el post original. Como no sé cual es y Pulga creo que tampoco espero me lo convaliden.

3-Exhibir el galardón, que es lo primero que he hecho y que repetiría aquí si supiera cómo.
Ahora voy allá con mis elecciones. Creedme que me supone un conflicto, pues no quiero que nadie se sienta rechazado, además que todos me hacen pensar. Así que creo que nominaré por orden de antigüedad en la generación de pensamientos.
1- A Ara, de Entre el cielo y el suelo (Aunque no sé si lo verá).
2- A Azul, de Azules.
3- A mi querido Simpulso, de Ni libre ni ocupado. (Este no lo lee ni de coña.)
4- A Maritornes, de Corte y corrección.
5- A Sir John More, del Hilo Invisible.
Los tenéis enlazados a la izquierda (es que me hago un lío con los vínculos).
Agradezco otra vez la distinción a mi Pulguilla y, de paso, le felicito a ella por haberla recibido.
Et voilà.


lunes, 27 de agosto de 2007

SIN PALO NI PIEDRA

Voy a pillarme los dedos. Tal vez poseída por la Sta Vehemencia. (Intuyo que esta entrada, a pesar de estar en mi mes Budista, me va salir bastante católica.)

A veces ocurren cosas que logran abrir la caja de Pandora. Sólo un poquito, por una esquina apenas, así que sólo escapa un hilillo de perversidad, de mala baba no siestera.
Qué sé yo: cuando te pitan con el semáforo recién abierto, cuando se te cuela la clásica señora en el supermercado. En estas ocasiones, la maldad se manifiesta con comentarios sarcásticos, quizá alguna voz más alta que otra, peinetas por la ventanilla...
Hay días en que otras cosas suceden, por ejemplo, un reventón en un gran premio de Fórmula 1.
En este caso, esos malos sentimientos toman forma de sonrisilla taimada. De jejeje. O si uno es más expresivo, de Jódete, Hamilton. Por ejemplo.

Me viene a la cabeza una frase que decía una amiga mía: Dios castiga sin palo ni piedra. Puede servirse de imponderables, de ángeles disfrazados de ingenieros de Mc Laren, de lo que tenga a mano, vaya. Todo por aquello de la justicia universal.



Pd.- Lo lamento si he ofendido a alguien. De veras. Ya me tocará hacer mi penitencia. Entretanto, tengo que reconocer que me he quedado como nueva. Es lo que tiene el deporte: que se libera mucha adrenalina.

Pd 2.- Me ha sentado genial dejar de analizar por un momento la insoportable levedad del ser y volcarme en asuntos más mundanos. ¿Terminaré viendo el Tomate? Tengo miedo.

jueves, 23 de agosto de 2007

AL QUE VIAJA DENTRO


Con esa timidez impropia de los seres sin conciencia de su ser (que nosotros sepamos), la flor, a la que aquí podría querer llamar Ella, se resiste a abandonar su lecho de agua.
Yo ya no me acuerdo, pero tuvo que ser grandioso vivir dentro la madre. Temperatura constante, alimentación precisa y sin esfuerzo. Flotar, sin más, ignorantes de si fuera es de día o es de noche. (Si alguien mantiene vivo en la memoria algo de aquellos días, por favor, le ruego lo comparta, por aquello de que quizá escuchando se aviven los propios recuerdos. Y no es que tenga fe en el psicoanálisis.)
Esa flor, Ella, lleva tiempo pensando y al fin se ha decidido. Asoma sus intentos. Mira a esas hojas, como satélites, y cree tal vez que el mundo es plano. O sencillo. Creo que por eso se aventura.
Puede que el miedo le haga temblar y nosotros, desde la barrera, lo achaquemos a la brisa.
O quizá nos contagie esos temblores.
O la firme decisión de comenzar la verdadera andadura de nuestros días. Ese camino que es el camino. Justo el de cada uno.
Con suerte, sí, la miraremos y una hebra de nuestro ovillo se perderá en la dirección correcta. Esa que nos aboca a empujar con pies y manos nuestras propias paredes para hacernos hueco. Para apartar todos esos pensamientos que nos mantienen tal vez salvos, pero nunca sanos.
Con suerte, sí, abriremos el capullo y empezaremos a parecernos a Ella. O a Él. Al que viaja dentro.


Pd.- Y con más suerte algunos/as saltaremos de nosotros/as mismos/as y dejaremos de ser unos/as capullos/as. O, al menos, dejaremos de parecer que lo somos, que ya es algo. Y perdón por el chiste fácil.

viernes, 17 de agosto de 2007

BABY HALDER

FOTO: Web TVE. "En Portada".

La mujer es tajante: no le merecen ninguna lástima aquellas que no luchan. Las que son como ella, las que se sobreponen a la losa de un mal karma, las que agotan las horas del día trabajando, a esas sí que les secaría el llanto.

Es joven, sí. Pero no es la suya esa juventud sobrevalorada hasta el absurdo en "occidente". Sus ojos han vivido más que la vida de sus años. Encierran esa sabiduría que tantos ignoramos siquiera que exista y, cuando lo intuímos, nos parece físicamente imposible que algo tan grande quepa en un cuerpo tan pequeño.

Su madre la abandonó, y al hacerlo le abrió un camino, aunque necesitó mucho dolor para darse cuenta. Y, tal vez, para dejar de odiarla.

La mujer lo tuvo claro desde siempre: sus hijos estudiarían. Tuvo claro que no se trataba tan solo de su karma. Con esa generosidad imposible que a veces exhiben los que nada tienen, pero aman.

A la mujer un buen día le regalaron un cuaderno y un lápiz. Y no sé si lo tuvo claro en aquel momento, pero después sí. Cuando hubo llenado todas sus páginas y se dio cuenta de que apenas había comenzado a escribir. Entonces supo que le habían regalado la libertad.

lunes, 13 de agosto de 2007

PEREZA

Para qué nos vamos a engañar. Llamémosle a las cosas por su nombre.
Y eso que podría decir que estoy sufriendo un bloqueo (¿Blogqueo?) y quedaría muy literaria, y hasta me haría la interesante por ello. Este fenómeno es bastante común, según parece. Uno se queda patidifuso ante la página en blanco. Las dudas comienzan a estirarse como chicles. Y a uno le entran ganas de empezar a escribir El Quijote o algo así. O de hablar de las fotos de Isabel Pantoja, (¿en el amor, en la guerra y en la literhartura todo vale?), pero, claro, desde una perspectiva posmoderna, o afterpop, con clara intención deconstructiva y que el demonio me confunda si se me ocurre caer la tardomodernidad, que es casi como decir, según tengo entendido, que eres un pesado, pero sobrado de talento para unir palabras con brillantez.
Decía que no voy a engañar a nadie. Que ideas tengo. Que lo que me pasa es que no junto las ganas suficientes. Que me apetece mucho más, señoras y señores, pensar en qué playa voy a ir a dar con mis huesos. He sucumbido a la pereza, sí. ¿Quién me tirará la primera piedra?

domingo, 5 de agosto de 2007

SERES SENSIBLES

Castillo de Amboise. (Francia)

como un pequeño ejército. y uno, sin embargo.

me gustaría entender el porqué de ciertas necesidades. la inclusión, la aprobación... no porque reniegue de ello, o porque no lo reconozca en mí, sino por ese ansia que a veces me invade de encontrar una explicación para lo que duele, como si esa explicación fuera a mitigar ese dolor.

qué se ve en los demás, qué misteriosa afinidad nos mueve a querer que nos quieran determinados seres y no otros. amores, amigos, conocidos-afines.

los senderos de la simpatía son inescrutables. pero esta curiosidad no puede cambiarme un ápice: somos como somos. seres sensibles. maravillosos cúmulos de defectos. necesitamos que nos amen. quizá el secreto de la armonía esté en lograr aceptarnos.

primero a nosotros mismos.

y luego saber ver que, si hay algo que nos iguala, es que todos perseguimos lo mismo: ser felices.

a mí esto me deshace un nudo dentro, no sé, como si se me vertiera un balde de ternura en el regazo.

miércoles, 1 de agosto de 2007

POTENCIAL DE REPOSO

hay un amplio margen entre la superficialidad absoluta y las plúmbeas espesuras de la conciencia. sin embargo, tienen un punto en común: ambas terminan por aburrir. incluso a uno mismo. fundamentalmente a uno mismo.
nadie se cansa del amanecer, ni del ruido del viento entre los árboles. nadie se cansa cuando está en equilibrio, las fuerzas compensadas. todo es cuestión de física. y todo es culpa de la física, de ciertos cortocircuitos microscópicos. electrones que se hacen preguntas, que nos susurran al oído. pasan de una órbita a otra y no miran con qué átomo. no se casan con nadie. buenos maestros.
así que, aburrida de corrientes eléctricas, he decidido no tratar de entender los fundamentos del electromagnetismo. este campo mío se entrega a la lavanda y al espliego: a sabiendas de que atraerá a una miríada de insectos.
respiro. eso es todo. y, como un acto reflejo, me entra la risa.

"Las preguntas a menudo se responden solas si las dejamos tranquilas." Thomas Merton.