Hace un par de meses recibí una noticia que, aunque yo creí que
había asimilado como parte natural de la vida, resultó que me
había dejado KO sin yo ni siquiera darme cuenta. Una se adapta, qué
remedio, sigue adelante, con lo urgente, lo inmediato. Y echa de
menos cosas, sí, pero bueno, se hace lo que se puede. Un día
una retoma actividades necesarias, proyectos de vida, y se da cuenta
de que han pasado dos meses. Dos meses en blanco.
Ayer los retomé. Con ilusión y miedo. Me llevó toda la mañana
escribir cinco páginas de la nueva novela. Acabé contenta, a pesar
de la evidente torpeza, de la lentitud. Así que hoy me he levantado
con ganas, esperanzada, con ilusión por continuar con esta bendita
inercia de escribir.
Me he levantado temprano, he arrancado el ordenador mientras me
preparaba un café, he buscado mi archivo y... había desaparecido.
He respirado hondo, he cogido mi memoria usb, la he conectado. Como
buena neurótica siempre guardo dos copias de lo que voy escribiendo.
Gracias al cielo, he pensado. Busco el archivo en la carpeta
correspondiente, lo abro... y las cinco páginas de ayer tampoco
estaban.
Son las diez de la noche y no he sido capaz de ponerme a
reescribirlas, del puro cabreo que todavía tengo. No tenía ni idea
de que me sabía tantas palabrotas. Estoy segura, segurísima, de
haber guardado el archivo por partida doble. No me cabe la menor
duda.
No tengo ni puñetera idea de qué significa esto, de si hay que
creer en las señales, o hacerle un gran corte de mangas al universo
y seguir adelante, simplemente. Conviene tener en nómina a los
duendes eso sí. Y no olvidarlos durante tanto tiempo. La vida es lo
que es, pero no mejora por dejar de hacer lo que queremos. Por
meternos en la rueda y volver a hacer el hámster. Desde aquí les
mando un beso a los duendes: espero que con esto se den por
desagraviados. He vuelto.
7 comentarios:
Leo leoooo, es una señal, sin duda. Que alegría esas dos palabras. He vuelto.
Un beso
¿Y no lo has encontrado en otro rincón, en otra carpeta, donde lo guardaste por error? ¡Qué rabia, qué rabia!!!
Besos (me alegra que vuelvas a escribir)
Mucho ánimo!!!
Comprendo tu enfado. Prueba a buscar alguna frase con la lupa esa que viene dando a Inicio. Cuando me ha pasado algo parecido a veces lo he solucionado así.
O tal vez no merezca la pena hacer nada, reescribir y encontrar algún detalle que la primera vez te pasó inadvertido.
Adelante.
Trabajando con ordenadores, especialmente con algunos sistemas operativos, se torna imprescindible no descuidar nuestros sacrificios a los dioses griegos, poner velas a santos, recitar unos mantras... que luego pasa lo que pasa.
Y los duendes más contentos que unas pascuas de verte de nuevo con el boli en la mano, mira que bien, incluidos por supuesto los duendes "buscadores", "encontradores", "recuperadores"...
Y sobre todo, es estupendo encontrar de nuevo las ganas de hacer lo que queremos. Me alegro.
Besos.
Jesús.
Los duendes contentos y nosotros también.
Un beso
Lo siento pero quizás te venga bien tener que reescribir. A mi me bloquearon el correo y no he podido recuperar ninguna dirección, tuve que abrir otro. Después de pasar un mal rato me alegré pues puse una dirección que me gustaba más.
Espero que me avises cuando publiques tu nobela.
Besos.
Muchas gracias a todos por vuestros comentarios animosos. Os informo que para vuestra alegría y sobre todo, para la mía, al final di con el archivo. Mis duendes me provocan despistes, debe ser. Menos mal que hay otros duendes, presumiblemente de carne y hueso, que nos ayudan a desfacer estos entuertos a golpe de teléfono. A ellos, en especial, y a todos vosotros ¡mil gracias!
Muchos besos.
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