jueves, 14 de febrero de 2013

MIS DUENDES


Hace un par de meses recibí una noticia que, aunque yo creí que había asimilado como parte natural de la vida, resultó que me había dejado KO sin yo ni siquiera darme cuenta. Una se adapta, qué remedio, sigue adelante, con lo urgente, lo inmediato. Y echa de menos cosas, sí, pero bueno, se hace lo que se puede. Un día una retoma actividades necesarias, proyectos de vida, y se da cuenta de que han pasado dos meses. Dos meses en blanco.
Ayer los retomé. Con ilusión y miedo. Me llevó toda la mañana escribir cinco páginas de la nueva novela. Acabé contenta, a pesar de la evidente torpeza, de la lentitud. Así que hoy me he levantado con ganas, esperanzada, con ilusión por continuar con esta bendita inercia de escribir.
Me he levantado temprano, he arrancado el ordenador mientras me preparaba un café, he buscado mi archivo y... había desaparecido. He respirado hondo, he cogido mi memoria usb, la he conectado. Como buena neurótica siempre guardo dos copias de lo que voy escribiendo. Gracias al cielo, he pensado. Busco el archivo en la carpeta correspondiente, lo abro... y las cinco páginas de ayer tampoco estaban.
Son las diez de la noche y no he sido capaz de ponerme a reescribirlas, del puro cabreo que todavía tengo. No tenía ni idea de que me sabía tantas palabrotas. Estoy segura, segurísima, de haber guardado el archivo por partida doble. No me cabe la menor duda.
No tengo ni puñetera idea de qué significa esto, de si hay que creer en las señales, o hacerle un gran corte de mangas al universo y seguir adelante, simplemente. Conviene tener en nómina a los duendes eso sí. Y no olvidarlos durante tanto tiempo. La vida es lo que es, pero no mejora por dejar de hacer lo que queremos. Por meternos en la rueda y volver a hacer el hámster. Desde aquí les mando un beso a los duendes: espero que con esto se den por desagraviados. He vuelto.

7 comentarios:

Blau dijo...

Leo leoooo, es una señal, sin duda. Que alegría esas dos palabras. He vuelto.

Un beso

Elvira dijo...

¿Y no lo has encontrado en otro rincón, en otra carpeta, donde lo guardaste por error? ¡Qué rabia, qué rabia!!!

Besos (me alegra que vuelvas a escribir)

Amparo dijo...

Mucho ánimo!!!
Comprendo tu enfado. Prueba a buscar alguna frase con la lupa esa que viene dando a Inicio. Cuando me ha pasado algo parecido a veces lo he solucionado así.
O tal vez no merezca la pena hacer nada, reescribir y encontrar algún detalle que la primera vez te pasó inadvertido.
Adelante.

La Rata Paleolítica dijo...

Trabajando con ordenadores, especialmente con algunos sistemas operativos, se torna imprescindible no descuidar nuestros sacrificios a los dioses griegos, poner velas a santos, recitar unos mantras... que luego pasa lo que pasa.

Y los duendes más contentos que unas pascuas de verte de nuevo con el boli en la mano, mira que bien, incluidos por supuesto los duendes "buscadores", "encontradores", "recuperadores"...
Y sobre todo, es estupendo encontrar de nuevo las ganas de hacer lo que queremos. Me alegro.
Besos.

Jesús.

añil dijo...

Los duendes contentos y nosotros también.

Un beso

Josefa dijo...

Lo siento pero quizás te venga bien tener que reescribir. A mi me bloquearon el correo y no he podido recuperar ninguna dirección, tuve que abrir otro. Después de pasar un mal rato me alegré pues puse una dirección que me gustaba más.
Espero que me avises cuando publiques tu nobela.
Besos.

leo dijo...

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios animosos. Os informo que para vuestra alegría y sobre todo, para la mía, al final di con el archivo. Mis duendes me provocan despistes, debe ser. Menos mal que hay otros duendes, presumiblemente de carne y hueso, que nos ayudan a desfacer estos entuertos a golpe de teléfono. A ellos, en especial, y a todos vosotros ¡mil gracias!
Muchos besos.