sábado, 30 de octubre de 2010

HORIZONTALES


Es sábado. Halloween. Me pinto los ojos aún más negros y salgo a la calle. Está lloviendo en Madrid. Puede que sea el otoño, pero ya pienso en términos de invierno. Los sábados la gente parece estar feliz. Cenan en grupo, se toman unas copas. Los jóvenes hacen botellón bajo las marquesinas, ni en un delirium tremens se acercarían a imaginar lo que les espera. La vida se desliza hacia la calle Montera. Madrid está lleno de hombres-lobo que caminan deprisa, que piensan en la conveniencia de que el Madrid-Barça se juegue en lunes. Y de mujeres-bruja como yo atrapadas en tópicos de cáncer. Por no ser original hoy estoy amarga. Voy a pintarme también los labios de rojo, usaré un retrovisor para mirarme (no hay retrovisores cuando pienso, cuando escribo). Oigo mis tacones sobre el pavimento. Veo gente disfrazada de vampiro y pienso que el mundo está poblado de fantasmas que no reconocemos. Esta noche, horizontales, también tú y yo seremos uno. Es probable. Tardaremos una hora más en llegar al invierno.

21 comentarios:

Azul... dijo...

Mi mujer-Maga favorita... No importa el tiempo que tarde en venir a tus rieles, siempre me tocas hondo...

Ya no se si merezco perdón por las ausencias y los silencios, pero el cariño es el mismo de siempre... igual q el deseo de que siempre- siempre, te vaya bien, por los caminos que deseas...

Mil besitos, guapa

Elvira dijo...

Te mando unas dulces castañas asadas para quitar el amargor. Besos

Amparo dijo...

Todo el mundo buscando tener miedo.
Una hora más.
Una representación muy buena.
Chao

La Rata Paleolítica dijo...

Llevaba algún tiempo alejado del mundo bloguerístico, así que en dos o tres días me he dado un atracón de tus cuatro últimas entradas qeu tenía pendientes; Por ahí tienes los comments.
El atracón ha sido fantástico, me ha sabido de muerte.
Y esta última me ha encantado. Endulzarse la vida horizontalmente, una buena opción, jajaaaa.
Besos.

Jesús.

Belén dijo...

TU no eres vampiara ni aunque lo intentes... tu propia dulzura hará que el maquillaje se desprenda...

Besicos

añil dijo...

Esta noche dormiremos una hora más y, si el sueño es agradable, disfrutaremos durante 60 minutejos que nos regalan por el morro.

Un beso

Blau dijo...

Leo leooo, desde mi horizontal siento el invierno llegar, ya quiero que lleguen los reyes.

Un besito

Sandra Sánchez dijo...

Hay muchos más vampiros y fantasmas a diario que el sábado jaja....
;)

leo dijo...

Azul: ¿Qué decirte? Te echo de menos. Nada más. Ojala no tardes en volver. Un abrazo grande.

Elvira: Gracias, me encantan las castañas. Me he puesto de buen humor solo de pensar en ellas. Un beso.

Amparo: Sí. Me llama la atención que nos gusten tanto las cositas de terror, como si no tuviéramos suficiente con lo cotidiano. :-)

Jesús: ¡Gracias por tus comentarios! Desde luego que te has pegado un buen atracón. Eres un sol. NO sabes cuánto te lo agradezco. :-)) Un besote muy grande.

Añil: Yo no sé tú, pero a mí esa hora de sueño me ha sentado de perlas. Lo malo es por la tarde, cuando el sol se escapa de entre los dedos y una se queda desarmada ante tanta noche. Un beso.

Blau: Ya no tardarán los Reyes, mi niña. Como has sido muy buena tendrás todo lo que pidas. Seguro. Un beso.

Pulgui: Intuyo que a diario pululan por las oficinas sin ser detectados. Por eso es tan difícil encontrar espejos en las multinacionales. ;-)

Juan F. Plaza dijo...

Hola Leo:
Te haces desear, la verdad. Pero siempre me alegra pasar por aquí. Una curiosidad: ¿has vuelto en Halloween por alguna razón confensable?
Abrazos

Filoabpuerto dijo...

muchos fantasmas a nuestro alrededor, cada vez más desconocidos nos sentimos en el asfalto... ¡Hay que salir a las calles y recuperarlas para la vida !

Abrazos
Merce

carmen dijo...

¿Te reflejaste en el espejo cuando te mirabas? A que sí. Tu no eres un fantasma.
Un beso muy gordo

Sandra Sánchez dijo...

jajaja muy bueno!

la cocina de frabisa dijo...

Te imagino con los ojos pintados de negro y los labios de rojo, apurando el paso y buscando un retrovisor en el que coquetear la noche.

Una hora más para vivir.

Un besito, Leo

Anónimo dijo...

la verdad que la vida se va en un cerrar y abrir de ojos, por eso todos nuestros pestaños son tan preciados como el mismo oro, saludos

leo dijo...

Woody: Jejej, supongo que mi inconsciente tiene sus razones que obviamente desconozco. Gracias.:-)

Merce: sobre todo en las ciudades grandes, en las que parecemos autómatas cabreados, de veras... Gracias.

Carmen: Me sigo reflejando por el momento, sí. Ni fantasma ni vampira, pero ¿por cuánto tiempo? Besissssss

Pulgui: :-))

Frabi: Me gustó lo de coquetear la noche, a ver si lo pongo en práctica. Besotes.

Maria Cristina: Bienvenida. Gracias por pasarte a verme. Un saludo.

Pablo Gonz dijo...

Hola, Leo:
Llego hasta aquí por un comentario que dejaste en el blog de Manu Espada. Esta nota es para decirte que enlacé tu blog desde el mío donde reúno links a páginas especializadas en microliteratura.
Un cordial saludo,
PABLO GONZ

Raquel dijo...

Sólo una hora hace falta para eso, pero muchísimas más para llegar a escribir tan bonito como tú lo haces, si es que se puede llegar.

Bego dijo...

Como siempre, ¡¡muy entretenido!!

leo dijo...

Pablo Gonz: Gracias por tu visita y por el enlace. Un saludo.

Raquel: Eres un sol. Y para eso hacen falta todas las horas del mundo y ninguna. Un beso grande.

Bego: Gracias, maja. :-)

arandanilla dijo...

Si no existiesen esos fantasmas...todo sería tan distinto...Espero que te encuentres bien, amiga...Mil besos y cuídate, guapa.